lunes, 26 de noviembre de 2012

¿QUÉ ES UN DECRETO METAFÍSICO?


Aprecid@visitante.

Dada la relativa complejidad de los temas que comparto contigo, he creído conveniente seguir con el desarrollo del Decreto Metafísico y cuando finalice el mismo, continuaré con la Afirmación Metafísica. Esta decisión la fundamento por mantener una continuidad evitando así posibles confusiones. Gracias por tu comprensión.

En una entrada anterior hemos analizado que la palabra en sí  misma es una vibración cargada de energía y poder con la cual puedes crear construyendo o destruyendo tu mundo interior y tu entorno y esto dependerá del uso correcto o incorrecto que hagas de ella. (Ver la entrada del lunes 26 de noviembre de 2012).

Jorge Hartkopf en su libro, “Metafísica Práctica” define el  decreto como: “Una afirmación verbal o mental sentida de tal forma que es capaz de producir el efecto de lo dicho”.

Las palabras que salen de tu boca no se las lleva el viento. La palabra es magia pura y tiene un destinatario. Incluso si en medio del campo gritas invocando a alguien, tiene un destinatario porque quedan plasmadas en forma de decreto. Tus pensamientos no se esfuman sino que también quedan plasmados en forma de decreto. 
La palabra es un pensamiento hablado. El pensamiento es un decreto silencioso, pero se cumple exactamente igual que un decreto pronunciado. Cada pensamiento o frase que dices o escribes se convierte automáticamente en un decreto el cual tarde o temprano verás  manifestado en tu vida.

Tus decretos son órdenes y tienen que ser cumplidas. El Universo, la Vida o como quieras llamarle, es impersonal y no selecciona cuáles decretos va a cumplir y cuáles no. Cumple absolutamente todos.

Si el decreto es positivo o negativo, será cumplido y se manifestará de igual manera. Por eso te recomiendo vigilar lo que piensas y cuidar lo que dices. Ser impecable con tus  palabras no es un lujo, es una necesidad.

Durante el día produces  infinidad de decretos, los cuales van a dar por resultado la realidad que estás experimentando y que en un futuro experimentarás. Quien se levanta diciendo  que tendrá un buen día, así lo tendrá más quien al amanecer diga lo contrario, será el día que obtendrá.

La clase de vida que tienes es el reflejo de lo que decretas

La buena suerte y la mala suerte no existen. Tú creas “la suerte” que tienes.

A las personas que todo les sale bien es porque decretan en positivo, siempre ven lo bueno de la gente y de las situaciones y es en lo que enfocan su palabra. Se les escucha decir… “Hoy es un buen día”, “Yo soy feliz”, “Yo tengo una vida excelente”, “Me gusta mi trabajo”, “Mi esposa/so es maravillosa/so”, “Tengo un buen jefe que siempre me reconoce y valora mi trabajo”, “Disfruto de la vida”, “Sabía que todo saldría bien”, “Yo soy próspero y saludable”. La lista podría continuar.

En cambio los que pasan el día en la queja, hablando mal de todo y de todos, de enfermedades, accidentes, falta de dinero, crisis mundial, resaltando las características negativas de otras personas, criticando y deseando el mal a los demás, eso es lo que obtienen.  Después esas personas ven manifestado lo que decretaron y se sorprenden por la vida que tienen culpando a todo y a todos de su “mala suerte” siendo que ellos la crearon.

Recuerda: “No es lo que entra por su boca lo que contamina al hombre, sino lo que de su boca sale; porque lo que de la boca sale, del corazón procede…”  Esto es  muy claro de entender. Lo que  decretas  con respecto a otros también te sucede. Si  haces un decreto a favor o en contra de alguien, lo decretado te será devuelto, pero multiplicado.

Cuando algo negativo te sucede, es importante examinar la clase de pensamientos y expresiones que tienes ya sea sobre ti o  sobre una  persona o situación en particular. El hecho de que no lo hayas pensado recientemente, no quiere decir que nunca lo  pensaste o expresaste. Si está presentándose, es porque lo fue en el pasado y ahora se te  está manifestando.

En una próxima entrada continuaremos con: el  uso del decreto y cuidado con lo que decretas.

Te deseo una larga vida y sabiduría para vivirla. Que tu Sol brille siempre.

Jesús de los Ángeles Rodríguez Martínez

3 comentarios:

  1. Y como se puede transmutar y o cambiar lo que ya se decreto en negativo, para que no se manifieste?

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    1. Con la llama violeta del perdon y la transmutacion y cambiando de pensamientos y sentimientos y manteniendolos asi, amor y positivismo

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    2. Gracias por tu visita y tu participación con la cual todos nos enriquecemos y evolucionamos. Un abrazo.

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