Apreciad@ visitante
Ya estamos a un día para que digamos adiós y gracias 2016 y es inevitable contener las
lágrimas y los recuerdos…
v Por lo que pudo ser
y no fue; por lo que siendo ya dejó de ser.
v Por las oportunidades que no supimos aprovechar… o no
quisimos… o no supimos y no quisimos aprovechar. O tal vez… ¡no pudimos!
La vida del adulto, y es lo que
somos o pretendemos ser, es un continuo “pagarle peaje -a la vida-” y
como tales, ni siempre logramos todo lo
que deseamos ni podemos tener todo lo que quisiéramos en nuestra vida. Pero, sin duda alguna, tenemos más de lo que
realmente queremos y necesitamos. Tenemos salud
-poca o mucha-; un trabajo o una ocupación y muchas experiencias
vividas hasta el día de hoy. Solo es cuestión
de “ver” con los ojos del corazón.
Teniendo presente esto te
invito a que
hagas un alto en tu cotidiano vivir para hacer un balance de todo lo que te
aconteció en este año que ya nos deja.
Posiblemente seas de esas
personas que tienen un calendario con faldilla para colgar en la pared donde en
el reverso de cada hoja mensual fuiste anotando, a modo de “diario
personal”, los hechos que te
acontecieron en cada mes y hoy has llegado a la última hoja.
Coge tu “diario”
y léelo con detenimiento haciendo un
repaso sincero de todo lo que hasta aquí has
vivido. Como si vieras una película en cámara lenta deja pasar cada uno de tus
“fotogramas”.
Ten el gusto de verte y sentirte a ti mismo. Verte pero sin
juzgarte; verte con mucho amor. Ve y siente cada
acto de tu vida en el que pusiste todo lo mejor y también cada evento en los
que no. Lo que te gustó y lo que no te gustó tanto de cada una de tus obras, de tus decisiones, de tu
entrega para contigo y para con los
demás.
Cuando hayas concluido tu
revisión abrázate
con amor y discúlpate por aquello que crees sinceramente
que debe ser disculpado. Absuélvete y quédate en paz. Mereces amarte, agradecerte y perdonarte. Y esto es así porque eres quien eres, tal cual eres, perfectamente
imperfecto.
Me
perdono. Me acepto. Me amo. Gracias
Estamos a punto de comenzar
un nuevo año y la Vida nos va a
entregar un nuevo “diario” con sus hojas en
blanco para que escribamos en él lo que
queramos.
Permíteme sugerirte que lo inicies pidiéndole -y escribiéndolo-
al Padre-Madre Universal
que vive en ti, o la Vida si no eres creyente, que te de la fuerza
para que seas un instrumento de paz
y no de violencia. Que donde haya odio, pongas amor; donde haya ofensa, pongas
el perdón; donde haya error, pongas la verdad; donde haya duda, pongas la
confianza; donde haya desesperación, pongas la esperanza; donde haya oscuridad,
pongas la luz; donde haya tristeza, pongas alegría.
Pídele que seas lo
suficientemente fuerte para que busques más consolar que ser consolado,
comprender que ser comprendido, amar que ser amado.
Y que te recuerde cada día de
tu existir que dando es como se recibe,
olvidándose de sí es como uno se encuentra y perdonando es como se recibe el
perdón.
No deseo terminar esta
entrada sin reconocer
y agradecer:
· ·
A Google; a YouTube;
a todos y cada uno de los que suben imágenes; a los autores de los textos; a los
editores; a los blogueros y a los autores anónimos. Sin ellos mi tarea habría
sido más laboriosa.
·
A todas aquellas
personas que, de modo directo o indirecto, han contribuido con sus enseñanzas y
sus ejemplos de vida animándome a continuar el viaje de descubrirme para realizar la
tarea más hermosa de mi vida cual es la búsqueda incesante de superarme día a
día intentando
ser la mejor versión de mí mismo.
·
A Toni, mi pareja
afectiva, por su apoyo incondicional.
·
A mis ancestros -incluso
los excluidos- ya que sin ellos yo no estaría aquí.
Gracias también…
Ø A mis seguidoras Gabrieladecolores, Mariale
y Tamara L. Penalva.
Ø A ti lector@ habitual, ocasional,
turista o casual.
Ø Y a tod@s por vuestro interés en mis
entradas. Al leerlas me han abierto las puertas de vuestro hogar y de vuestro
corazón.
Les invito a coger vuestras
copas; juntos brindemos para despedir
este año que ya nos dice adiós. Démosle la bienvenida
al Nuevo Año
brindando con:
v Fe
y Esperanza
en un mañana mejor, siendo cada uno de nosotros los
constructores de ese futuro.
v Con sueños, con ilusiones y con metas
renovados.
v Y con Amor… de pareja afectiva; de amistades; de
familiares.
Apreciadas seguidoras, apreciad@s visitantes, en nombre de Antonio y mío les deseamos que Dios, el Padre-Madre
Universal, la Energía Cósmica del Amor, o la Vida llenen sus hogares de alegría;
que tengan un trabajo para sustentar sus vidas y que la Prosperidad, la Abundancia, el
Suministro, la Opulencia, la Paz y el Amor siempre les acompañen.
¡Feliz Nochevieja y Bendecido Año Nuevo
2017!
Que el Espíritu
de la Navidad y la Energía Cósmica del Amor sean con tod@s nosotr@s hoy y siempre.
Jesús de los
Ángeles Rodríguez Martínez
Fuentes
Imágenes tomadas de la web
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